Qué es
Ante todo conviene aclarar que el concepto de “reuma” no existe en los libros de medicina, es decir,
no hay ninguna enfermedad o dolencia del aparato locomotor que reciba el nombre de “reuma”.
La sociedad ha agrupado bajo el nombre de “reuma” o “reumatismo” a todo
el conjunto de dolencias o molestias relacionadas con el aparato
locomotor, quizá como consecuencia del desconocimiento de su distinta
naturaleza y la creencia en una causa común para todas ellas.
Existe más de un centenar de enfermedades diferentes del aparato locomotor. La
Reumatología es la especialidad de la medicina que se ocupa de las
enfermedades del aparato locomotor y las enfermedades autoinmunes sistémicas y el médico especialista en estas enfermedades es el
reumatólogo.
Síntomas
El
dolor es el síntoma más frecuente que suele localizarse
en las articulaciones
o alrededor de las mismas. Puede ser pasajero o aparecer sólo con los
movimientos como, por ejemplo, en las manos al coser, en las rodillas al
andar o en la espalda al agacharse; pero también puede ser fijo y
persistente, llegando a impedir realizar los movimientos o conciliar el
sueño. El dolor, a veces, se acompaña de sensación de rigidez o
entumecimiento de las articulaciones que mejora con el movimiento. Pero
el dolor también puede proceder de los músculos, de los tendones o de
otras estructuras del aparato locomotor llegando a ser muy molesto. Los
reumatólogos, mediante un cuidadoso interrogatorio y un examen físico
son capaces de averiguar la mayoría de las veces el origen del dolor.
Otras veces, las enfermedades reumáticas producen molestias,
pinchazos, sensación de pesadez,
tirantez o cansancio localizados en una zona del cuerpo (hombro,
cuello, región lumbar, piernas, etc.) o con una distribución
generalizada o difusa,
como si estuviera implicado todo el organismo y que la persona afectada manifiesta con una frase como: “me duele todo” o “me levanto peor que me acuesto”.
Otro síntoma fundamental es la
hinchazón o tumefacción de las articulaciones.
Es consecuencia del acúmulo de líquido sinovial dentro de la cavidad
articular y puede estar ocasionado por multitud de procesos. Es un signo
de enfermedad articular que nos debe llevar a consultar con un
reumatólogo. Las enfermedades del aparato locomotor también pueden
producir otros síntomas, como pérdida del apetito, pérdida de peso,
pérdida de fuerza, debilidad, cansancio, fiebre o alteraciones en otros
órganos o sistemas (piel, ojos, boca, aparato digestivo, pulmón, riñón,
etc.).
Diagnóstico
El diagnóstico se basa en un
adecuado interrogatorio y un exhaustivo
examen físico.
Su reumatólogo analizará las características del dolor, su
distribución, el número de articulaciones afectadas, la presencia de
hinchazón, etc., logrando realizar un diagnóstico la mayoría de las
veces. En ocasiones unos análisis pueden servir de ayuda para confirmar
una enfermedad ya sospechada durante el interrogatorio o para seguir la
evolución de un enfermo.
Igual que no hay “reuma”, sino
enfermedades reumáticas, tampoco hay pruebas reumáticas definitivas,
sino pruebas de laboratorio que ayudan a confirmar o descartar alguna
enfermedad del aparato locomotor.
Pruebas como las radiografías,
la ecografía, la resonancia y otras técnicas, son útiles en algunos
casos, si bien en muchos casos no son necesarias o añaden poco al
diagnóstico clínico ya realizado antes de pedirlas.
Más información
El reuma