El
objeto (o cuerpo extraño) ingerido por un niño puede tener distinto
tamaño y naturaleza: pieza de un juguete, trozo de alimento, moneda….
Cuando este es aspirado, puede quedar impactado a cualquier nivel, desde
el más superior (faringe) hasta el más inferior (bronquiolos). En
general, cuanto más arriba quede impactado el cuerpo extraño, mayor será
la gravedad, porque puede obstruir totalmente la entrada de aire a los
pulmones.
Cuando un niño se atraganta, generalmente reacciona de inmediato con accesos de tos
para intentar expulsarlo. Otros posibles síntomas son: babeo abundante,
estridor (ruido especial al respirar), palidez de piel o incluso
cianosis (piel azulada).
La tos espontánea posiblemente sea más eficaz y segura que cualquier maniobra que un reanimador pueda realizar. Sin embargo, si el niño no tose o la tos es ineficaz, se asfixiará en poco tiempo. En este caso, las maniobras deben ser iniciadas de forma rápida y decidida, procurando no entrar en pánico ya que el tiempo resulta muy importante en estas situaciones.
Si el niño llega a perder la consciencia, además de solicitar ayuda médica de inmediato (si no se hubiera hecho ya) debemos hacer lo siguiente:
La tos espontánea posiblemente sea más eficaz y segura que cualquier maniobra que un reanimador pueda realizar. Sin embargo, si el niño no tose o la tos es ineficaz, se asfixiará en poco tiempo. En este caso, las maniobras deben ser iniciadas de forma rápida y decidida, procurando no entrar en pánico ya que el tiempo resulta muy importante en estas situaciones.
Las
recomendaciones que se van a dar a continuación, corresponden al manejo
del atragantamiento en el lactante, o lo que es lo mismo, el niño
menor a 2 años de edad. En niños mayores se realizan maniobras algo
diferentes, que veremos en otra ocasión.
¿CÓMO ACTUAR?
En primer lugar, nos fijaremos en si el lactante está consciente o inconsciente.
Si está consciente, y además presenta tos efectiva (el niño tose con fuerza), debemos procurar por todos los medios que siga tosiendo, mientras le vigilamos estrechamente.
Al mismo tiempo, si es posible, observaremos el interior de su boca para ver si identificamos el cuerpo extraño. Si lo vemos y este nos pareciera accesible, pondremos el dedo índice con forma de gancho e intentaremos extraerlo, haciendo un movimiento de barrido. Pero si lo vemos muy impactado o no vemos nada, es mejor no hacer esta maniobra.
Puede ocurrir que el cuerpo extraño, por acción de la tos, sea expulsado a través de la boca, o por el contrario puede que el niño se vaya cansando cada vez más y la tos se vuelva ineficaz (débil). En este caso, debemos hacer lo siguiente:
Si está consciente, y además presenta tos efectiva (el niño tose con fuerza), debemos procurar por todos los medios que siga tosiendo, mientras le vigilamos estrechamente.
Al mismo tiempo, si es posible, observaremos el interior de su boca para ver si identificamos el cuerpo extraño. Si lo vemos y este nos pareciera accesible, pondremos el dedo índice con forma de gancho e intentaremos extraerlo, haciendo un movimiento de barrido. Pero si lo vemos muy impactado o no vemos nada, es mejor no hacer esta maniobra.
Puede ocurrir que el cuerpo extraño, por acción de la tos, sea expulsado a través de la boca, o por el contrario puede que el niño se vaya cansando cada vez más y la tos se vuelva ineficaz (débil). En este caso, debemos hacer lo siguiente:
- Colocar al bebé boca abajo a lo largo del antebrazo del adulto (la cabeza del niño debe quedar más baja que el resto de su cuerpo).
- Con la palma de la mano, darle 5 golpes secos entre los omóplatos (también llamados escápulas o “paletillas”).
- Acto seguido, girar al bebé boca arriba (su cabeza debe continuar estando más baja que el resto de su cuerpo) y con la yema de 2 dedos, darle 5 golpes en el centro del esternón.
Estas
maniobras se irán repitiendo una y otra vez, tantas veces como sea
necesario, hasta que el cuerpo extraño sea expulsado o, en el peor de
los casos, hasta que el niño se deteriore y pierda la consciencia.
Si el niño llega a perder la consciencia, además de solicitar ayuda médica de inmediato (si no se hubiera hecho ya) debemos hacer lo siguiente:
- Colocar al niño sobre una superficie firme.
- Darle 5 insuflaciones de rescate (5 respiraciones boca/boca, o boca/boca-nariz si es un lactante muy pequeño).
- Empezar a hacer reanimación cardiopulmonar básica (RCP básica).
PARA RECORDAR…
- El atragantamiento es una de las principales causas de mortalidad accidental en niños.
- La edad crítica es por debajo de los 5 años de edad (especialmente por debajo de los 3), aunque puede ocurrir en cualquier etapa.
- Debemos evitar a toda costa cierto tipo de alimentos / objetos en niños menores de 5 años:
- Alimentos: FRUTOS SECOS (nueces, almendras, cacahuetes, anacardos, pistachos…), UVAS ENTERAS, ZANAHORIA CRUDA, SALCHICHAS (incluso troceadas), alimentos con tendencia a pergarse al paladar como un trozo de PAN o de CARNE (en este caso no es que la carne esté desaconsejada pero sí hay que tener precaución)o un gajo de MANDARINA, CARAMELOS, CHICLES, LACASITOS, ROSCAS (PALOMITAS), etc.
- Objetos: GLOBOS (SOPLADERAS), COLLARES, PULSERAS, PENDIENTES, MONEDAS, Y JUGUETES CON PIEZAS PEQUEÑAS.
Miriam Barroso García. Pediatra. Z.B.S. Agüimes
Pedro J. Martín Pérez. Médico de familia. Z.B.S. Agüimes
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